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Prestamistas privados

Recurrir a prestamistas privados puede ser una opción para aquellas personas que necesitan dinero rápido o que tienen dificultades para conseguir un préstamo de un banco. 

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Los prestamistas privados pueden ser individuos, empresas, fondos de inversión o entidades que disponen de capital disponible para hacer préstamos. A diferencia de los bancos, los prestamistas privados no están regulados por la legislación bancaria y, por tanto, no siguen las mismas regulaciones que las entidades de financiación tradicionales. 

Es por esto que los prestamistas privados pueden conceder préstamos con términos y condiciones mucho más flexibles que los de los bancos. No obstante, los prestamistas privados sí que deben obedecer las leyes aplicables a su sector en su país correspondiente y, por tanto, es obligación del solicitante del préstamo asegurarse de que el prestamista privado las cumple verificando así su credibilidad. 

Tipos de prestamistas privados

Existen varios tipos de prestamistas privados: 

  • Prestamistas individuales o personas que prestan su propio dinero a cambio de pagar una tasa de interés.
  • Empresas que se dedican a prestar dinero. Pueden ser grandes corporaciones financieras o empresas más pequeñas.
  • Prestamistas de capital privado o empresas que reúnen el capital de inversores y luego prestan el dinero.
  • Empresas que ofrecen préstamos a corto plazo, una semana o dos, a cambio de altas tasas de interés.
  • Prestamistas de préstamos garantizados que otorgan préstamos garantizados por un activo, como lo puede ser una casa o un automóvil.
  • Prestamistas de préstamos no garantizados que otorgan préstamos sin garantía, es decir, sin la necesidad de poner en garantía un activo.

Es importante destacar que los prestamistas privados tienen unas tasas de interés más altas que los bancos debido principalmente a que asumen un riesgo mucho mayor con las personas a las que conceden los préstamos, al no contar estas, en la mayoría de los casos, con ahorros suficientes.

Motivos para acudir a prestamistas privados

Hay varias razones por las cuales son muchas las personas que acaban recurriendo a prestamistas privados:

  • No disponer de suficientes ahorros bancarios para pedir un préstamo. 
  • Situaciones de emergencia financieras o hacer pagos inesperados con la mayor brevedad posible. 
  • Reunificar deudas con altas tasas de interés para tener solo un préstamo privado y tener que hacer solo un pago mensual. 
  • Financiación de negocio o emprendimiento, ya que muchos bancos no conceden préstamos para ello. 
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Diferencias entre un prestamista privado y un prestamista particular

Los términos «prestamista privado» y «prestamista particular» se usan a menudo de forma indistinta, aunque es muy importante destacar que no hacen referencia a los mismo. 

Los prestamistas privados como decíamos al inicio pueden ser individuos, empresas, fondos de inversión u otras entidades que disponen de capital suficiente para prestar y que además lo hacen con tasas de interés elevadas. 

Mientras que un prestamista particular hace referencia a una persona que presta dinero a otra persona. Como podría ser un amigo o un familiar, sin que necesariamente sea una empresa. Por razones obvias, a menudo, este tipo de préstamos cuentan con intereses más bajos. 

Condiciones para pedir un préstamo privado

Los requisitos para pedir un préstamo privado pueden variar dependiendo del prestamista privado o del tipo de préstamo que se solicite. Aún así, y en general, la solicitud de un préstamo privado conlleva reunir los siguientes requisitos: 

  • El solicitante debe tener al menos 18 años.
  • Estudio del historial crediticio del solicitante. 
  • Demostrar que se cuentan con ingresos estables o suficientes para hacer frente al pago de las cuotas. 
  • Disponer de garantías para asegurar el préstamo como una propiedad o un vehículo. 
  • Tener a mano la documentación oficial necesaria como DNI en vigor, comprobantes de ingresos, resumen financiero actualizado,… 
  • Recurrir a un posible avalista si así lo considera necesario el prestamista privado. 

Pasos para solicitar un préstamo privado

Independientemente a quién se le solicite un préstamo privado, los pasos a seguir son los mismos:

  • Investigar y comparar opciones para encontrar el mejor préstamo financiero.
  • Evaluar los requisitos y asegurar que se cumplen todos antes de formalizar la solicitud.
  • Cumplimentar la solicitud. Por lo general se trata de un formulario que pide información personal, como el nombre completo, la dirección, la información laboral, el ingreso, y la cantidad de préstamo que se solicita.
  • Hacer llegar la documentación necesaria al prestamista. 
  • Esperar una respuesta, la cual normalmente tarda unas 48 horas.
  • Firmar el contrato.
  • Recibir el dinero. 
  • Pagar las cuotas mensualmente. 

Pedir un préstamo privado puede tener varias ventajas como la flexibilidad en los términos, el procesamiento rápido, aprobación sencilla, personalización, … Aunque si bien es cierto también pueden contar con algunos inconvenientes como las tasas de interés más altas o el riesgo de fraude por parte de un prestamista falso. Para evitar desgracias, lo recomendable es recurrir a prestamistas privados con garantías. Por tanto, es fundamental investigar y comparar varios perfiles antes de solicitar un préstamo.

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